Para conseguir una belleza que aguante el paso del tiempo, es imprescindible seguir unos hábitos saludables, cómo puede ser seguir una dieta variada y completa, consumir la suficiente cantidad de líquidos, hacer algo de deporte… sin embargo, encontrar el equilibrio adecuado puede ser más complicado de lo que parece.

Es por esta razón, por lo que son muchas las personas las que se deciden por el consumo de nutricosméticos.

¿Qué son los nutricosméticos?

Estamos hablando de un tipo de sustancia comestible que tienen propiedades regenerativas para la piel, logrando que presente un aspecto más sano y radiante. Está demostrado que pueden retrasar el envejecimiento de las células, incluso hasta lograr un bronceado de nivel, de la misma manera que si nos hubiéramos ido de viaje.

Los podemos encontrar en forma de comprimidos o de cápsulas y, aunque si bien es cierto que no son una novedad en el mercado (es decir, que se llevan usando desde hace algunos años), es ahora cuando se han puesto de moda. Ahora bien, usar estos productos no significa que tengamos que olvidarnos de nuestros cuidados diarios, si no que más bien se deben de usar como complementos, nunca como sustitutivos.

Nutricosméticos según la zona a tratar

Nutricosméticos fotoprotectores orales

Están pensadas para poder proteger nuestra dermis ante cualquier tipo de agente externo, cómo pueden ser los nocivos rayos del sol, los cambios extremos de temperatura y/o humedad, y mucho más.

Un buen ejemplo de este tipo de artículo es el producto Arkosol Advance 30 Perlas, pudiéndolo encontrar en el mercado a un precio muy ajustado. Además, son muchas las personas la que lo han probado, y la gran mayoría de las mismas alaban sus característicos resultados.

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También puedes echar un vistazo a las Heliocare UItra-D 30 cápsulas, ayudándote a lograr resultados también muy especiales.

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Píldoras para cuidar la piel

Por su parte, estos productos están pensados para tratar algunos de los principales síntomas del envejecimiento, así como ciertos problemas como ojeras o bolsas. Han sido pensados para  que nuestra piel sea cuidada de la forma en la que cabría esperar, aportándole los micronutrientes correspondientes. Suponen un complemento perfecto cuando no se reciben los nutrientes suficientes a través de la dieta.

Píldoras / cápsulas para cuidar el cabello

Y terminamos con estas pastillas, porque no todo va a ser cuidar nuestra piel. Nuestro cabello también es susceptible a ciertos cambios del entorno; pudiendo tornarse muy frágil con el paso del tiempo si no se cuida de la forma en la que deberíamos. Las fórmulas más completas integran algunos elementos muy especiales como zinc, o vitaminas del complejo B, estimulando el crecimiento capilar, además de hacer que crezca mucho más fuerte.

Ahora que ya conoces la alternativa de la nucricosmética, y todo lo que puede ofrecer a tu piel y a tu cabello, te recomendamos que analices el tipo de producto que más te conviene y empieces a usarlo.